Lección XIII.
Del estado de los judíos después del cautiverio.
Babilonia fue tomada por Ciro, rey de Persia, que dio libertad a los judíos y les permitió volver a su país y reedificar el templo y la ciudad de Jerusalén. Alejandro Magno vino después, y sometió al imperio de los griegos la mayor parte del mundo. Habiéndose mezclado los judíos con las naciones infieles, no dejaron por eso de guardar puntualmente su religión, y no recayeron en la idolatría después de su cautiverio. El conocimiento del verdadero Dios se iba propagando poco a poco en medio del paganismo. Sin embargo, hubo algunos reyes que persiguieron a los judíos para hacerles dejar su santa ley y adorar los ídolos. Antíoco el Ilustre, rey de Siria, tomó a Jerusalén, profanó el templo e interrumpió los sacrificios. Muchos judíos padecieron con fortaleza la muerte y aun los mayores tormentos; pero Judas Macabeo y sus hermanos tomaron las armas en defensa de su libertad y de las leyes, y Dios les protegió de tal modo, que libraron al pueblo del yugo de las naciones. El gobierno quedó en la familia de los Macabeos, y hubo de ellos algunos reyes, pero muy pronto fueron arruinados por los romanos, que se hicieron dueño del mundo, Los Profetas habían vaticinado todo esto.
P. ¿Quién libró a los judíos de la cautividad de Babilonia?
R. Ciro, rey de Persia.
P. ¿A qué condujo el que los judíos se mezclasen con las otras naciones?
R. Para dar a conocer al verdadero Dios entre los infieles.
P. Después de la cautividad, ¿cayeron los judíos otra vez en la idolatría?
R. No.
P. ¿Quién fue el primero que luego los persiguió por su religión?
R. Antíoco, rey de Siria, y griego de nación.
P. ¿Por quién empezó el imperio de los griegos?
R. Por Alejandro Magno.
P. ¿Quiénes fueron los que resistieron a Antíoco?
R. Judas Macabeo y sus hermanos.
P. ¿Qué hicieron?
R. Pusieron al pueblo en libertad.
P. Desde este tiempo, ¿quién gobernó a los judíos?
R. La familia de los Macabeos.
P. ¿Quién los arruinó?
R. Los romanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario