La felicidad tiene un rostro: Jesús de Nazaret.
"El Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una Virgen está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel, que significa `Dios-con-nosotros`."
Reflexión de S.S. Benedicto XVI.
"La felicidad que buscáis, la felicidad a la que tenéis derecho de saborear tiene un nombre, un rostro: el de Jesús de Nazaret, oculto en la Eucaristía. Sólo El da plenitud de vida a la humanidad. Decid, con María, vuestro "sí" a Dios, que quiere entregarse a vosotros.
Os repito hoy lo que dije al principio de mi pontificado: "Quien deja entrar a Cristo en la propia vida no pierde nada, nada, absolutamente nada de lo que hace la vida libre, bella y grande.
¡No! Sólo con esta amistad se abren de par en par las puertas de la vida. Estad plenamente convencidos: Cristo no quita nada de lo que hay de hermoso y grande en vosotros, sino que lleva todo a la perfección para la gloria de Dios, la felicidad de los hombres y la salvación del mundo."
No hay comentarios:
Publicar un comentario