Martirologio Romano (1956).

16 de Enero

1. En Roma, en la vía Salaria, el triunfo de san Marcelo I, Papa y Mártir, el cual, por la confesión de la fe católica, de orden del tirano Majencio, fue primeramente apaleado, después condenado a cuidar bestias con un centinela de vista, y allí mismo, cuidando de ellas vestido de cilicio, acabó su vida.
   • Más información:
     • Santoral del Padre Grosez, S.J.
     • Meditación sobre la corrupción del mundo.
2. En Marruecos de África, el suplicio de los cinco santos Proto-mártires de la Orden de Menores, a saber: Bernardo, Pedro y Otón, Sacerdotes; Acursio y Adyuto, Legos; los cuales por predicar la fe católica y reprobar la ley de Mahoma, después de varios tormentos y afrentas, cortadas con un cuchillo las cabezas, fueron muertos por el rey de los Sarracenos.
3. En Rinocolura de Egipto, san Melas, Obispo, que en tiempo de Valente, habiendo padecido el destierro y otros graves trabajos por la fe católica, descansó en paz.
4. En Arlés de Francia, san Honorato, Obispo y Confesor, cuya vida fue ilustre en doctrina y milagros.
5. En Oderzo, en los confines de Venecia, san Ticiano, Obispo y Confesor.
6. En Fondi del Lacio, san Honorato, Abad, de quien hace mención san Gregorio Papa.
7. En un castillo llamado Maserolles, junto al río Authie, en Francia,san Furseo, Confesor, cuyo cuerpo fue más tarde trasladado al monasterio de Perona.
8. En Roma, santa Priscila, que consagró su persona y sus bienes en piadoso obsequio de los Mártires.

Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Deo Gratias.