miércoles, 27 de febrero de 2013

Martirologio Romano (1956).


  1. En ísola del Abruzzo, san Gabriel de la Virgen Dolorosa, Clérigo de la Congregación llamada de la Cruz y Pasión del Señor, y Confesor; el cual, esclarecido con grandes méritos en el breve curso de su vida, y con milagros después de la muerte, fue puesto en el catálogo de los santos por el Papa Benedicto XV.
  2. En Roma, el triunfo de los santos Mártires Alejandro, Abundio, Antígono y Fortunato.
  3. En Alejandría, el suplicio de san Julián, Mártir, que, padeciendo de gota hasta el punto de no poder andar ni mantenerse en pie, fue presentado al Juez con dos criados suyos, que le llevaban en una silla; de éstos, el uno negó la fe; el otro, llamado Euno, perseveró con su amo en la confesión de Cristo. Ambos, Julián y Euno, puestos en sendos camellos, fueron paseados por toda la ciudad, cruelmente azotados, y por último, encendida una hoguera, quemados en medio del pueblo, que lo contemplaba.
  4. En el mismo lugar, san Besa, soldado, el cual, como refrenase a los que insultaban a dichos Mártires, llevado al Juez y confesando constantemente la fe, fue decapitado.

  5. SAN LEANDRO, Obispo y Confesor
  6. En Sevilla de España, el tránsito de san Leandro, Obispo de la misma ciudad, hermano de los santos Isidoro Obispo y Florentina Virgen; el cual, con su predicación e industria, y con la ayuda del Rey Recaredo, convirtió a la nación Visigoda, de la impiedad Arriana a la fe católica.
  7. En Constantinopla, los santos Confesores Basilio y Procopio, que en tiempo del Emperador León combatieron valerosamente por el culto de las sagradas Imágenes.
  8. En Lyon de Francia, san Baldomero, Subdiácono, varón consagrado a Dios, cuyo sepulcro resplandece con frecuentes milagros.
Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Deo Gratias.

martes, 26 de febrero de 2013

Comunicado de la FIUV con respecto a la Renuncia de S.S. Benedicto XVI.


La renuncia del Papa Benedicto XVI.

Federación Internacional Una Voce. 

La noticia de que el Papa Benedicto XVI dejará la Cátedra de San Pedro en el último día de febrero de 2013 fue recibida con tristeza por los miembros de la Federación Internacional Una Voce. 
Nuestro Presidente fundador, el Dr. Eric de Saventhem, y su sucesor, Michael Davies, fueron siempre bien recibidos en Roma por el Cardenal Ratzinger el que fue un gran apoyo para los objetivos de la Federación en la promoción de la liturgia tradicional y la restauración de la Misa Tradicional una vez más en el altar. La confianza inquebrantable de nuestros ex presidentes fue reivindicado poco después de la elección del cardenal Ratzinger al papado, en abril de 2005. 
La promulgación del Motu Proprio Summorum Pontificum, en julio de 2007, a poco más de dos años de su pontificado, fue el acto de un Papa que mostró coraje ante la gran oposición. En la introducción al Motu Proprio el Papa Benedicto XVI dijo: 
"Desde tiempos inmemoriales ha sido necesario - como lo es también para el futuro - para mantener el principio según el cual cada Iglesia particular debe concordar con la Iglesia universal, no sólo en lo que respecta la doctrina de la fe ya los signos sacramentales, sino también respecto a los usos universalmente aceptados de la ininterrumpida tradición apostólica, que deben observarse no solo para evitar errores, sino también para transmitir la integridad de la fe, porque la ley de la Iglesia de la oración corresponde a la ley de la fe. 
Entre los pontífices que tuvieron esa preocupación, resalta el nombre de San Gregorio Magno, que hizo todo lo posible para asegurarse de que los nuevos pueblos de Europa se transmitiera tanto la fe católica como los tesoros del culto y de la cultura que se había acumulado por los romanos en los siglos precedentes. .... Se sabe, en efecto, que la liturgia latina de la Iglesia en sus diversas formas, en cada siglo de la era cristiana, ha sido un acicate para la vida espiritual de numerosos santos y ha reforzado a tantos pueblos en la virtud de la religión y ha fecundado su piedad. " 
La inmensa valentía del Papa Benedicto XVI en declarar públicamente lo que muchos sabían, pero eran reacios o temerosos de expresar, que el Misal Romano promulgado por el beato Papa Juan XXIII en 1962 nunca había sido derogada y que esta forma de la Misa era permisible, ha traído y seguirá aportando, abundantes gracias a la Santa Madre Iglesia y las generaciones futuras. Con la riqueza de la enseñanza que nos dejó, esta clarificación de la posición de la liturgia tradicional en la Iglesia por el Papa Benedicto XVI, fue una contribución más histórica al Magisterio de la Iglesia para reafirmar el vínculo en el culto de las generaciones pasadas a las generaciones del futuro . El usus antiquior de ayer, es hoy día de hoy, y será de mañana. Un segundo florecimiento del usus antiquior en efecto, es llevar alegría a nuestra juventud. Su extensión y aumento milagroso, de la que el Papa Benedicto XVI ha sido el instrumento providencial, se manifiesta de un número creciente de jóvenes que están en contacto con la Federación Una Voce. 
Por consiguiente, la Federación Internacional Una Voce da gracias a Dios Todopoderoso por el papado del Papa Benedicto XVI, a quien le expresamos nuestra gratitud filial, y al que damos, y seguirá dando, nuestras oraciones y acciones de gracias. 22 de febrero 2013. Fiesta de la Cátedra de San Pedro. 

domingo, 24 de febrero de 2013

Domingo 2º de Cuaresma.

Hoy el Breviario nos habla del patriarca Jacob, modelo que es de entera confianza en Dios, aun en medio de los mayores contratiempos.
Toda la vida de Jacob es figurativa de Cristo. Dice San Agustín que "el hecho de la bendición que Isaac concedió a Jacob tenía un sentido simbólico, por cuanto las pieles de cabrito representaban los pecados, y Jacob revestido de esas mismas pieles era imagen de Aquél que, no teniendo pecados propios, cargó con los ajenos" (Maitines). Simbolismo que todavía recuerda el Pontifical Romano al obispo, cuando se pone los guantes para celebrar Misa.
Jacob fue "el suplantador" de su hermano Esaú, pues le ganó su derecho de primogenitura. Jesús, a su vez, suplantó al demonio, principe de este mundo, arrebatándole su presa con un arte y astucia divinas: ars ut artem falleret.
Jacob en su lucha con el Ángel salió al fin vencedor, y desde entonces le mandó Dios que se llamase Israel, o sea fuerte contra Dios. Pero más fuerte aun fue Cristo Jesús, el cual con dolores y luchas a brazo partido con el ángel malo, lo venció y, lo que es más, logró desarmar a Dios mismo, atándole las manos de su justicia para que no descargase sobre la tierra culpable los golpes merecidos de su ira.
Además Jesucristo es nuestro hermano mayor y nuestro capitán. Debemos escuchar sus palabras porque Él nos ha elegido para ser su propio pueblo. Claramente nos inculca esto la Epístola de hoy.
Jesús se aplica también a sí mismo la aparición de la escala de Jacób, para demostrar que en medio de las persecuciones se ve continuamente protegido por la divinidad y por los Ángeles (S. Juan I, 51). Dice también San Hipólito que "así como Esaú urdía la muerte de su hermano, así el pueblo judío tramó la muerte de Cristo y de su Iglesia.
Jacob hubo de huir muy lejos; y Cristo, a su vez, rechazado por la incredulidad de los suyos, hubo de fugarse a Galilea, en donde le fue dada por esposa la Iglesia, proveniente de la raza gentílica". Mas al fin de los tiempos estos dos pueblos, judío y gentil, llegarán a reconciliarse. También el Evangelio de hoy tiene como precursor en la visión de Jacob.
Él vió la gloria de Dios, y los Apóstoles la vieron en la Transfiguración, y más tarde cuando se les apareció inundado en divinales efluvios después de resucitado.
Hagámonos dignos de contemplarle cuando la Iglesia y su liturgia nos le presenten radiante de gloria el santo día de Pascua, preludio de la Pascua eterna y de la visión beatífica que no tendrá fin, y que colmará plenamente las ansias más profundas y más nobles de nuestro ser.
*

viernes, 22 de febrero de 2013

La Cátedra de San Pedro en Antioquía.


LA CÁTEDRA DE SAN PEDRO
Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia;
y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella;
y a ti te daré las llaves del reino de los cielos.
(Mateo 16, 18-19)
La Iglesia celebra en este día la toma de posesión, por San Pedro, del obispado de Antioquía. Bien merecido tenía esta ciudad de que su primer obispo fuese el Príncipe de los apóstoles y Vicario de Jesucristo, pues en ella los fieles hacíanse cada vez más numerosos, y allí, por vez primera, tomaron el bello nombre de cristianos que han conservado después. San Pedro trasladose posteriormente a Roma y estableció en ella su sede episcopal definitiva.
MEDITACIÓN
SOBRE LA SANTA IGLESIA
I. Hay una sola Iglesia, porque hay un solo Dios, y tú tienes la dicha de estar en esta Iglesia. ¿Has agradecido a Dios esta merced ? Puesto que hay una sola Iglesia, es menester que los hijos de esta Iglesia tengan un solo corazón y una sola alma, a imitación de los primeros cristianos. ¿Qué haces tú para mantener la paz y la caridad con tu prójimo? En el amor al prójimo es donde se conocerá si eres discípulo de Jesucristo.
II. La Iglesia es santa, porque Jesucristo su cabeza es santo, porque sus primeros fundadores son santos, porque un gran número de sus miembros son santos, en fin, porque su doctrina, sus ceremonias, sus sacramentos son santos. He aquí una buena cantidad de medios y de motivos para que te hagas santo. ¿Eres digno hijo de esta Iglesia? Compara tu vida con la de los primeros cristianos que perseveraban noche y día en oración, y entregaban sus bienes a los apóstoles para que los distribuyesen a los pobres.
III. Se la llama católica, es decir, universal, por que está esparcida por toda la tierra y porque admite en su seno a toda clase de personas. Se la llama apostólica, porque viene de los apóstoles que la establecieron en el mundo mediante su santidad, su doctrina y la efusión de su propia sangre. Si quieres ser digno hijo de la Iglesia católica, abre tu corazón, ama a todos en Jesucristo. Jamás hagas algo que deshonre el título que llevas.Recuerda de qué cabeza y de qué cuerpo eres miembro (San León).
El celo por la salvación de las almas.
Orad por toda la Iglesia.
ORACIÓN
Oh Dios, que al confiar a San Pedro, vuestro Apóstol, las llaves del reino de los cielos, le disteis el poder de atar y desatar, concedednos por su intercesión la gracia de ser librados de las cadenas que nos sujetan al pecado. Vos, que siendo Dios, vivís y reináis por todos los siglos de los siglos.

miércoles, 20 de febrero de 2013

MEDITACIÓN SOBRE LAS PERSECUCIONES.


SAN EUQUERIO,
Obispo y Confesor
† 20 de febrero del año 743
Todos los que quieren vivir virtuosamente según Jesucristo,
han de padecer persecución.
(2 Timoteo 3, 12)
San Euquerio es movido por la gracia y abandona el mundo; pero es sacado de su retiro y es nombrado obispo de Orleáns. Demasiado amaba la gloria de Dios, como para que pudiera vivir en paz con el mundo, que es el enemigo de Jesucristo. Por su justicia fue pronto perseguido y desterrado a Colonia, más tarde a Lieja. Obtuvo el permiso de retirarse al monasterio de San Trond, donde murió en el año 743. Obró gran número de milagros sobre su tumba.
MEDITACIÓN
SOBRE LAS PERSECUCIONES
I. La virtud es perseguida en el mundo; no es su centro, ni el lugar de su reposo. Prepárate a sufrir los insultos de los hombres, si quieres vivir como servidor de Jesucristo. El discípulo no es más que su maestro. ¡Qué dicha para mí, dulce Jesús mío, ser maltratado como Vos, y por amor vuestro! ¡Oh mundo infiel, cuán agradables me resultan tus persecuciones, pues me hacen amigo de Dios! ¡Oh siglo, qué culpable que eres! ¡Para hacer felices a tus amigos, los haces enemigos de Dios! (San Bernardo).
II. No te inquietes por lo que el mundo diga de ti; el mundo es un insensato que no juzga sino por pasión. Trata de contentar a Dios y a tu conciencia, y deja que hable el mundo y sus adoradores. Empero, combate con tus palabras sus falsas máximas, y con la santidad de tu vida sus malos ejemplos; prepárate a sufrir afrentas, burlas y calumnias, que son la copa que prepara para los discípulos de Cristo, y di con San Pablo: Si yo agradase a los hombres, no sería servidor de Jesucristo.
III. Persevera constantemente en la práctica de la virtud, sin mirar nunca atrás; resiste todos los ataques del mundo; es el modo de vengarte noblemente de este enemigo de tu virtud; dejará de atacarte cuando reconozca que eres invencible. Ruega a Dios por aquellos que te proporcionan la ocasión de practicar la paciencia. Tus oraciones y tus buenos ejemplos harán, con harta frecuencia, que tus perseguidores te admiren y te imiten.
El desprecio del mundo.
Orad por las congregaciones religiosas.
ORACIÓN
Dios todopoderoso, haced que la augusta solemnidad del bienaventurado Euquerio, vuestro confesor y pontífice, aumente en nosotros el espíritu de devoción y el deseo de nuestra salvación. Por J. C. N. S.

martes, 19 de febrero de 2013

Martirologio Romano (1956).


  1. En Roma, el triunfo de san Gabino, Presbítero y Mártir, que fue hermano del Papa san Cayo, el cual, aherrojado largo tiempo en la cárcel por Diocleciano, con una preciosa muerte se granjeó los gozos celestiales.
  2. En África, los santos Mártires Publio, Julián, Marcelo y otros.
  3. En Palestina, la conmemoración de los santos Monjes y otros Mártires que, en odio a la fe cristiana, fueron cruelísimamente muertos por los Sarracenos que acaudillaba Almondir.
  4. En Nápoles de Campania, san Quod-vult-Deus, Obispo de Cartago, el cual, junto con su Clero, puesto por el Rey Arriano Genserico en unas naves rotas, sin remos ni velas, llegó, contra toda esperanza, a Nápoles, y, allí desterrado, murió Confesor.
  5. En Jerusalén, san Zambdas, Obispo.
  6. En Soles de Chipre, san Auxibio, Obispo.
  7. En Benevento, san Barbato, Obispo, que, célebre en santidad, convirtió a los Longobardos y a su Caudillo a la fe de Cristo.
  8. En Milán, san Mansueto, Obispo y Confesor.
Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Deo Gratias.

sábado, 16 de febrero de 2013

Santa Juliana.


Virgen y Mártir
† martirizada hacia el año 305
Patrona de los enfermos.
SANTA JULIANA, Virgen y Mártir
El cielo y la tierra pasarán,
pero mis palabras no pasarán.
(Lucas 21, 33)
Santa Juliana, considerando el orden admirable del universo, reconoció que era la obra de un Dios único y soberanamente poderoso, y abrazó la religión cristiana. Evilacio, prefecto de Nicomedia, pidió su mano, pero Juliana le respondió que no quería por esposo a un adorador de los falsos dioses. Evilacio, pasando entonces del amor al odio, la hizo azotar, cargar de cadenas y encerrar en una prisión. Mientras estaba en oración en su calabozo, el espíritu de las tinieblas se le apareció transformado en ángel de luz para persuadirla a renegar de su fe. Juliana deshizo el artificio haciendo la señal de la cruz, y para burlarse del demonio, lo cargó con sus propias cadenas. La condenaron a ser quemada viva, pero como las llamas no obraban con suficiente actividad, le cortaron la cabeza.
MEDITACIÓN
EL MUNDO ES UN GRAN LIBRO
I. El mundo es un gran libro en el cual San Antonio aprendió a amar a Dios y Santa Juliana a conocerlo. En este libro hay creaturas que nos representan la bondad de Dios. El sol y la luna nos alumbran, la tierra nos da frutos y flores para nuestro alimento y nuestro recreo. Consideremos estas creaturas, y demos gracias a Dios que nos las dio como otras tantas prendas de su amor. ¡Ah! si la tierra nos ofrece a la vista tantas cosas admirables, ¿qué delicias no nos reservará el cielo? Si el destierro es tan hermoso, ¿cuánto no la será la patria? (San Agustín).
II. Al lado de esas creaturas tan admirables, hay otras, en el mundo, que nos molestan y nos incomodan. Si en ocasiones ponen a prueba tu paciencia, agradece a Dios que te recuerda, por este medio, que estás en un lugar de destierro y no en tu patria. Sufre con paciencia, diciéndote a ti mismo: Si tanto hay que sufrir en este mundo, ¡cuáles no serán los tormentos de los condenados en el infierno!
III. Considera que en la tierra todo es pasajero, que en el cielo todo es eterno. Los hombres mueren, cambian las estaciones, sucédense los imperios, el mundo pasa, y tú también como él: tu vida y tus placeres huyen, lo que ves no es sino belleza fugitiva o, mejor dicho, un ligero rayo de la belleza permanente y eterna de Dios (Tertuliano).
La consideración de las obras de Dios.
Orad por la conversión de los infieles.
ORACIÓN
Que la bienaventurada Juliana, virgen y mártir, implore por nosotros vuestra misericordia, Señor, ella que siempre os fue agradable por el mérito de su castidad y por su valor en confesar vuestro Santo Nombre. Por J. C. N. S.

viernes, 15 de febrero de 2013

Martirologio Romano (1956).

  1. En Brescia, el triunfo de los santos Mártires Faustino y Jovita, hermanos, que en el imperio de Adriano, al cabo de muchos y gloriosos combates sostenidos por la fe de Cristo, recibieron la victoriosa corona del martirio.
  2. En Roma, san Cratón, Mártir, que bautizado con su esposa y toda su familia por san Valentín, Obispo, no mucho después, juntamente con ellos, consumó el martirio.
  3. En Terni, el nacimiento para el cielo de los santos Mártires Saturnino, Cástulo, Magno y Lucio.
  4. Allí mismo, santa Ágape, Virgen y Mártir.
  5. En Vaison de las Galias, san Quinidio, Obispo, cuya muerte atestiguan que fue preciosa en el acatamiento del Señor los frecuentes milagros.
  6. En Capua, san Decoroso, Obispo y Confesor.
  7. En la provincia de Valeria, san Severo, Presbítero, el cual, como escribe san Gregorio Papa, con sus lágrimas devolvió la vida a un difunto.
  8. En Antioquía, san José, Diácono.
  9. En Auvernia de Francia, santa Georgia, Virgen.
Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Deo Gratias.
También en este día:
SAN CLAUDIO DE LA COLOMBIÈRE, Confesor

jueves, 14 de febrero de 2013

San Valentín.


Mártir
† decapitado hacia el año 269 en Roma
Patrono de parejas de novios; matrimonios; amor; jóvenes; viajeros; apicultores. Protector contra los desvanecimientos; epilepsia; plagas.
SAN VALENTÍN, Mártir
Yo soy la luz del mundo: quien me sigue,
no anda en tinieblas sino que tendrá a luz de la vida.
(Juan 8, 12)
San Valentín, en su prisión, rogaba a Jesús que iluminase a los gentiles con los rayos de su divina luz. Asterio, lugarteniente del prefecto de Roma, oyó su plegaria, y le prometió creer que Jesús es la luz del mundo si devolvía la vista a su hija. Púsose el santo en oración y restituyó la vista a la ciega, con lo que Asterio, con toda su familia, se convirtió. Algunos días después, Valentín fue azotado y, finalmente, se le cortó la cabeza.
MEDITACIÓN
SOBRE LA GRACIA
I. La gracia de Dios se parece a la luz, en que, aquélla como ésta, se da a todos. A nadie la rehúsa Dios y es suficiente para salvarnos si la queremos aprovechar. ¡Cuánto reconocimiento debemos a Dios, especialmente nosotros los cristianos, que hemos sido colmados de gracias! ¿Cuántas has recibido? ¿No han sido inútiles? Aprovecha las que Dios te acuerda; trabaja mientras te alumbra la luz. Agradece a Dios por sus mercedes, no sea que ciegues la fuente con tu ingratitud.
II. Tu inteligencia a menudo es iluminada por medio de estas gracias, que San Agustín llama rayos de la luz eterna. ¡Qué de veces Dios te ha hecho conocer claramente la vanidad del mundo y la solidez de los bienes del cielo! Alimenta esta luz celestial meditando con frecuencia las grandes verdades que la fe nos enseña.
III. Sería inútil esta luz si, después de haber iluminado la inteligencia, no excitase la voluntad a la práctica de las virtudes difíciles. Lo propio de la gracia es hacer obrar, enfervorizar el corazón del que la recibe, y disminuir las dificultades que suscita la virtud. ¿No es verdad que a veces te sientes atraído por Dios tan dulcemente que el sacrificio de ti mismo te parece fácil? Aprovecha los preciosos momentos de la gracia; son semejantes a una semillita que encierra un gran árbol: la eternidad depende de ese momento (San Bernardo).
El deseo de los sufrimientos.
Orad por la conversión de los pecadoresa.
ORACIÓN
Haced, os suplicamos, Dios omnipotente, que celebrando el nacimiento al cielo de vuestro bienaventurado mártir Valentín, obtengamos por sus oraciones ser librados de todos los males que nos amenazan. Por J. C. N. S.

miércoles, 13 de febrero de 2013

Miércoles de Ceniza.


ESTACIÓN EN SANTA SABINA - ORNAMENTOS MORADOS
A imitación de los Ninivitas, los cuales hicieron penitencia bajo la ceniza y el cilicio, la Iglesia, para domar nuestro orgullo y recordarnos la sentencia de muerte que sobre nosotros recae en pena del pecado1, pone hoy ceniza sobre nuestras cabezas, diciendo: «Acuérdate, hombre, de que eres polvo y al polvo has de volver». Tenemos ahí el vestigio de una antigua ceremonia. Los cristianos que habían cometido algún pecado grave y público debían también someterse a pública penitencia, y para eso, el Miércoles de Ceniza, el Pontífice bendecía los cilicios que los penitentes iban a llevar puestos durante toda la Santa Cuarentena, y les imponía la ceniza sacada de las palmas que habían servido el año anterior para la procesión de los Ramos. Luego, mientras los fieles rezaban los Salmos penitenciales, se «expulsaba a los penitentes del lugar santo, por causa de sus pecados, como había sido arrojado Adán del Paraíso por su desobediencia» (Pontifical). Los penitentes no dejaban sus vestidos de penitencia, ni entraban en la iglesia hasta el Jueves Santo, después de haber sido reconciliados por los trabajos de la penitencia cuaresmal y por la confesión y absolución sacramentales.
MIÉRCOLES DE CENIZA

El Papa Urbano VI, en el Concilio de Benevento (1091) mandó que la ceniza fuese impuesta también a los simples fieles porque «Dios perdona los pecados a los que de ellos se duelen» (Introito)«Es rico en misericordias para con los que a Él se vuelven de todo corazón por el ayuno, las lágrimas y gemidos» (Epístola). Y no hemos de desgarrar nuestros vestidos en señal de dolor, cual lo hacían los Fariseos, sino nuestros corazones (Epístola).
«Saquemos de la Eucaristía el auxilio de que hemos menester» (Poscomunión), a fin de que, «celebrando hoy la apertura solemne del ayuno sagrado» (Secreta)«terminemos la carrera con una devoción que nada sea capaz de turbar» (Or.).
Fuente: Misal Diario - Dom. Gaspar Lefebvre, O.S.B.
1. La ceniza es símbolo de penitencia, y bendita por la Iglesia, se trueca en un sacramental que nos mueve a desarrollar en nosotros el espíritu de humildad y de sacrificio.

lunes, 11 de febrero de 2013

Nuestra Señora de Lourdes.


NUESTRA SEÑORA DE LOURDES
En cuanto a mí de nada me gloriaré,
sino de mis flaquezas.
(2 Corintios 12, 5)
El 11 de febrero de 1858, la Santísima Virgen dignose mostrarse por primera vez a Santa Bernardita Soubirous; la última aparición tuvo lugar el 16 de julio de ese mismo año. Desde entonces, las peregrinaciones se han sucedido procedentes de todas las partes del mundo, y, en multitud, los enfermos han acudido a implorar a María Inmaculada. Muchos han obtenido una milagrosa curación, muchos otros han recibido la gracia de soportar sus padecimientos con espíritu de fe y de ofrecerlos a Dios.
MEDITACIÓN
SOBRE CÓMO ES PRECISO
SOPORTAR LAS ENFERMEDADES
I. La enfermedad es un presente de Dios que, a menudo, nos es más útil que la salud. Dios tiene sus designios cuando nos envía una enfermedad: quiere castigarnos por nuestros pecados, o apartarnos de ellos, o bien ejercitar nuestra paciencia y dar nos ocasión de adquirir méritos. Si seriamente buscases la razón de tus sufrimientos, encontrarías que Dios quiere acosarte para que renuncies a tus vicios y lleves una vida más santa. No nos quejemos de nuestras enfermedades, ellas pueden ser para nosotros fuente de grandes virtudes (Salviano).
II. Sufre pacientemente los dolores de tu enfermedad, súfrelos de buena gana y por el amor de Dios. Mas, como Dios te impone el deber de velar por tu salud, recurre a los medios humanos. Sigue las prescripciones del médico y obedece a los que te cuidan. El que sufre tiene muchas ocasiones de practicar la virtud: aprovecha diligentemente estas ocasiones.
III. No murmures, no te impacientes; persuádete de que estás en tu lecho como en una cruz, y mira con qué paciencia sufrió Jesús en la suya. Para imitarlo, piensa en todos los pobres enfermos abandonados y en los suplicios de las almas del purgatorio; y recuerda que en las adversidades y en los sufrimientos es donde se reconoce al hombre virtuoso. En la adversidad, el pecador se queja y su impaciencia se derrama en blasfemias; el justo sufre con paciencia (San Cipriano).
La paciencia.
Orad por los enfermos.
ORACIÓN
Oh Dios, que por la Inmaculada Concepción de la Virgen habéis preparado un digno santuario a vuestro Hijo, concedednos, os suplicamos, que, celebrando la aparición de María Santísima, obtengamos la salud del alma y del cuerpo. Por J. C. N. S.

sábado, 9 de febrero de 2013

Quincuagésima.


Los nombres del Domingo de Quincuagésima. Para muchos cristianos este domingo señalaba el inicio del ayuno anterior a la Pascua, por lo que se llamaba, como entre los sirios, Dominica ingresii jejunii. Para otros, la Quincuagesima marcaba la fecha después de la cual la carne quedaba prohibida y, consecuentemente, se dio por llamarle Dominica carnis privium, ad carnes tollendas, carnevala. Habida cuenta que tales reglas afectaban principalmente al clero, encontramos también el nombre carnes privium sacerdotium. En los sitios en los que la abstinencia empezaba más temprano, esta fecha indicaba el día en que se prohibían la leche y los huevos (ova et lacticinia), y por lo que en griego se le llamaba con el equivalente al latín Dominica cesei comestrix et ovorum; entre los melquitas, sublationis ovorum et casei. Los eslavos la llamaban Ned. III. Predpepelnicna, que significa " tercer domingo antes del Miércoles de Ceniza". Los bohemios, Ned. II po devitniku, o segundo domingo después del noveno antes de Pascua. En muchos lugares este domingo y los siguientes dos días eran usados para preparar la Cuaresma mediante una buena confesión.
Como los días previos a la Cuaresma eran con frecuencia destinados al desenfreno, Benedicto XIV, por medio de la constitución "Inter Caetera" (1 enero de 1748) introdujo una especie de "devoción de las cuarenta horas" para proteger a los fieles de diversiones peligrosas y para llevar a cabo alguna reparación por los pecados cometidos.

Las lecturas. Como los domingos anteriores que nos presentaban a Adán y a Noé, las lecciones de maitines se centran en la persona de Abraham, padre de la fe por su confianza total en la promesa divina. Solo con los ojos de la fe se puede comprender el misterio de Cristo. Los apóstoles no comprenden las palabras del Señor que anuncian su pasión, muerte y resurrección. Faltaba la visión de fe. A continuación, se nos narra la curación del ciego al borde del camino. Confiesa a Jesús como Hijo de David, como el Mesías esperado. Insiste en su oración. Súplica su curación. El Señor lo cura: "tu fe te ha salvado".
En la Epístola de este domingo, san Pablo nos presenta la carta magna del Cristianismo: la caridad. Amor de Dios por la humanidad en su plan salvífico. Amor del hombre que ha de responder a su Redentor. Amor de los hombres que se han de amar como hijos de Dios. Esta respuesta del hombre esta condicionada por la fe: ahora vemos como un espejo, ahora conozco imperfectamente... En el cielo, solo quedará la caridad. Será ella la que nos permita ver a Dios cara a cara.

Las oraciones y las cantos propios de la misa. Para alejar el grave peligro de ser sitiada en qué en un tiempo se hallaba la ciudad de Roma, en las tres basílicas que forma como un triángulo protector de la ciudad: San Pedro, San Pablo y san Lorenzo, se celebraron tres misa con textos que ahora forman los de la presente y los de las dos precedentes dominicas. Recémoslos, pues, en nuestras constantes peligros con las sobrenaturales esperanzas en que su tiempo las inspiraron.

viernes, 8 de febrero de 2013

San Juan de Mata.


Confesor
n. 23 de junio de 1160 en Provenza, Francia;
† 12 de diciembre de 1223 en Roma, Italia
SAN JUAN DE MATA, Confesor
El mayor entre vosotros
ha de ser vuestro servidor.
(Mateo 23, 11)
Este santo es el fundador de la orden de la Santísima Trinidad, destinada, al igual que la que más tarde fundó San Pedro Nolasco, al rescate de los cristianos cautivos de los moros. Tan baja opinión tenía de sí mismo y un respeto tan grande por el sacerdocio, que no consintió en ser ordenado sino por obediencia a los insistentes requerimientos del arzobispo de París. En el mismo día de su primera misa Dios le inspiró la generosa resolución de trabajar para la salvación de los cristianos que gemían en la esclavitud.
MEDITACIÓN
SOBRE LOS TRES MOTIVOS
QUE DEBEN MOVERNOS
A HUMILDAD
I. La verdadera humildad está basada sobre el conocimiento de sí mismo. ¿Qué eras antes de que Dios te creara? ¿Dónde estabas? ¿Qué hacías? Eras nada; Dios, por su bondad, hizo que fueses. Sin embargo, te glorías de ello; te crees necesario para la gloria de Dios y para la salvación de las almas, te crees indispensable para la familia o para la sociedad de que formas parte. Sin ti muy bien se las arreglaron Dios y los hombres antes de tu nacimiento; igualmente sucederá después de tu muerte.
II. ¿Y qué eres al presente? Tu cuerpo no es sino corrupción; tu alma, ignorancia y malicia. Tu vida es una llama que el menor soplo apaga. Cuida cuanto quieras tu salud, es preciso que, por fin, tu vida acabe, y que tus grandes proyectos se disipen en humo. ¡Oh hombre! si conocieses tu nada, conocerías la grandeza de tu Dios y serías humilde en su presencia. Para conocer a Dios, aprende a conocerte a ti mismo (San Cipriano).
III. ¿Qué serás durante toda la eternidad? ¿Quién lo sabe? Ignoras si serás víctima del infierno o heredero del paraíso. Puedes tener vanidad cuando te dices a ti mismo: Yo no sé adónde iré después de mi muerte; mi cuerpo descenderá a la tumba, pero, mi alma, ¿a dónde irá? Humíllate delante de los hombres. Ése que ahora te parece despreciable y malo, acaso un día esté más elevado que tú en el cielo. ¡Señor Jesús, haced que os conozca y que me conozca a mí mismo! (San Agustín).
El amor a las humillaciones.
Orad por los que os persiguen.
ORACIÓN
Oh Dios, que milagrosamente habéis instituido, por medio de San Juan de Mata, la orden de la Santísima Trinidad, para el rescate de los cautivos del poder de los sarracenos, haced, benignamente, que ayudados por sus méritos
y por vuestra gracia, seamos librados de la cautividad del cuerpo y del alma. Por J. C. N. S.

jueves, 7 de febrero de 2013

Retiro Miércoles de Cenizas.

La Parroquia San José de Algarrobito perteneciente al Arzobispado de La Serena, Chile, ofrece el siguiente programa de Retiro de Miércoles de Cenizas.
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miércoles, 6 de febrero de 2013

Santa Dorotea.


Virgen y Mártir
† martirizada hacia el año 303 en Cesarea, Capadocia
Patrona de floristas; jardineros; novias; recién casados.
SANTA DOROTEA, Virgen y Mártir
¿Quién podrá separarnos del amor de Cristo?
¿Acaso la tribulación, o la angustia, o el hambre,
o la desnudez, o el peligro, o la persecución, o el cuchillo?
(Romanos 8, 35)
Santa Dorotea es representada con rosas en la mano. Estas flores son prendas preciosas del amor de Jesús, su divino Esposo. En el momento en que iba a ser muerta, un pagano, llamado Teófilo le declaró que creería en el Dios de los cristianos, si le mostraba flores y frutos del huerto de su Esposo. Dorotea levantó los ojos al cielo y un ángel le trajo una canastilla con tres rosas y tres manzanas. Este milagro convirtió a Teófilo, que, con Dorotea, recibió la corona del martirio, hacia el año 303.
MEDITACIÓN
SOBRE LA CASTIDAD
REPRESENTADA POR LA ROSA
I. Considera las rosas que trae el ángel a Dorotea; descubrirás en ellas tres cualidades que debe poseer una virgen para conservar la pureza. El color de la rosa es el pudor, y el pudor es el compañero de la virtud. ¿Quieres ser casto? Ten pudor; él guarda las murallas de tu corazón. Huye de los lugares donde se ven o se oyen cosas capaces de herir la pureza y de avergonzar a la virtud.
II. Tiene la rosa sus espinas, que punzan a todos los que se le aproximan, nobles o ricos, rústicos o pobres. ¡Qué gran lección para una virgen! Siempre debe conservar una circunspección y una severidad que aparten de ella a las personas de vida desordenada; nunca debe complacerse en palabras, ni en actos, por mínimamente deshonestos que sean. Además, las espinas son emblema de la mortificación, y la mortificación es la salvaguardia de la pureza del cuerpo y del alma. Sin ella, imposible conservarse puro.
III. La rosa se eleva hacia el cielo, como para decir que sólo tiene belleza y amor para Dios, y que de Él espera el rocío y la luz necesarios para su conservación. Almas castas, pedid a Dios la pureza, no os fiéis de vosotras mismas; si Dios no os la concede, inútiles son vuestros cuidados y austeridades. Aprended de esta flor, vírgenes consagradas a Dios, que no debéis tener belleza sino para agradar a Dios, ni amor sino para Él. Que las vírgenes no busquen otra cosa que agradar a Dios, porque de Él solo esperan la recompensa de su virginidad (San Cipriano).
La confianza en Dios.
Orad por vuestros amigos.
ORACIÓN
Que la bienaventurada Dorotea, virgen y mártir, implore por nosotros, oh Señor, vuestra misericordia, ella que siempre os fue agradable por la hermosura de su castidad y por su valentía en confesar vuestro Santo Nombre. Por J. C. N. S.

martes, 5 de febrero de 2013

Martirologio Romano (1956).


SANTA ÁGATA, Virgen y Mártir
  1. En Catania de Sicilia, el triunfo de santa Águeda, Virgen y Mártir, la cual, imperando Decio, por sentencia del Juez Quinciano, después de torturada, abofeteada, descoyuntada en el potro y cercenados los pechos, la revolcaron sobre tejuelas y brasas; y, finalmente, en la cárcel, mientras oraba al Señor, acabó su vida.
  2. En Nangasachi del Japón, el suplicio de veintiséis Mártires: de ellos tres Sacerdotes, un Clérigo y dos Legos pertenecían a la Orden de los Menores; otros tres, uno de ellos Clérigo, a la Compañía de Jesús, y diecisiete a la Orden tercera de san Francisco. Todos ellos, crucificados y alanceados por la fe católica, mientras alababan al Señor y predicaban la misma fe, acabaron gloriosamente. El Sumo Pontífice Pío IX los puso en el catálogo de los Santos.
  3. En el Ponto, la conmemoración de muchísimos santos Mártires, en la persecución de Maximiano; de ellos unos, bañados en plomo derretido; otros, atormentados en las uñas con cañas agudísimas y vejados con muchos y horrendos suplicios varias veces repetidos, merecieron del Señor, con tan ilustre martirio, las palmas y coronas.
  4. En Alejandría, san Isidoro, soldado y Mártir, a quien, en la persecución de Decio, Numeriano, General del ejército, cortó la cabeza por la fe de Cristo.
  5. En Viena, san Avito, Obispo y Confesor, por cuya fe, celo y admirable doctrina se preservaron las Galias de la herética peste del Arrianismo.
  6. En Seben de la Recia segunda, san Ingenuíno, Obispor, cuya vida fue ilustre en milagros. Su sagrado cuerpo fue más tarde trasladado a Brixen, donde se guarda honoríficamente
  7. En Brixen, san Albuíno, Obispo, el cual trasladóla Cátedra Episcopal de Seben a dicha ciudad, donde, esclarecido en milagros, pasó al Señor.
Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Deo Gratias.

lunes, 4 de febrero de 2013

Martirologio Romano (1956).


SAN ANDRÉS CORSINI, Obispo y Confesor
  1. San Andrés Corsino, de la Orden Carmelitana, Obispo de Fiésole y Confesor, cuya dichosa muerte se conmemora el día 6 de Enero.
  2. En Roma, san Eutiquio, Mártir, el cual consumó un ilustre martirio y fue sepultado en el cementerio de Calixto; san Dámaso Papa honró más tarde su sepulcro con un epitafio en verso.
  3. En Thmuis de Egipto, el martirio de san Fileas, Obispo de dicha ciudad, y Filoromo, Tribuno militar; los cuales, en la persecución de Diocleciano, no pudiendo ser persuadidos por los parientes y amigos a que mirasen por la propia vida, presentando ambos el cuello al cuchillo, merecieron del Señor la palma del martirio. Con ellos innumerable multitud de fieles de la misma ciudad, siguiendo el ejemplo de su Pastor, recibieron la corona del martirio.
  4. En Fosombrone, los santos Mártires Aquilino, Gemino, Gelasío, Magno y Donato.
  5. En el reino de Malabar, en la India oriental, san Juan de Britto, Sacerdote de la Compañía de Jesús; el cual, habiendo convertido muchos infieles a la fe, fue coronado con glorioso martirio.
  6. En Troyes de Francia, san Aventino, Presbítero y Confesor.
  7. En Pelusio de Egipto, san Isidoro, Presbítero y Monje, señalado en méritos y doctrina.
  8. En Sempringham de Inglaterra, san Gilberto, Presbítero y Confesor, Fundador de la Orden de Sempringham.
  9. En el pueblo de Amatrice, en el Abruzzo, el nacimiento para el cielo de san José de Leonisa, Sacerdote de la Orden de Menores Capuchinos y Confesor; el cual, habiendo padecido crueles tormentos de los Mahometanos por predicar el Evangelio, ilustre en trabajos apostólicos y milagros, fue puesto en el catálogo de los Santos por el Sumo Pontífice Benedicto XIV.
  10. En Bremen, la conmemoración de san Remberto, que fue discípulo de san Anscario, y, en este día, el siguiente a la muerte de su maestro, fue elegido, en su lugar, Obispo de Hamburgo y Bremen.
  11. En Bourges de Aquitania, santa Juana de Valois, Reina de Francia, Fundadora de la Orden de la santísima Anunciación de la Virgen santa María, ilustre por la piedad y por la singular participación de la Cruz, inscrita por el Papa Pío XII en el catálogo de las santas.
Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Deo Gratias.

domingo, 3 de febrero de 2013

Domingo de Sexagésima.

La liturgia de este domingo también se entiende a la luz del Breviario que nos habla de Noé.
Al ver Dios que era grande por demás la malicia de los hombres, airado contra ellos, dijo un día a Noé: "Voy a exterminar al hombre a quien creé. Hazte, pues, un arca de madera resinosa, porque firmaré un pacto contigo, y tú entrarás en el arca."
Al cabo sucedió lo que Dios había dicho, y cayó sobre la tierra una lluvia torrencial durante 40 días y 40 noches, flotando siempre el arca sobre las aguas, que cubrieron hasta las más empinadas montañas.
Entonces se cumplió aquello del Gradual que "todos los hombres fueron arrebatados cual vil pajuela por una trompa de agua", no quedando a salvo sino Noé y las personas y animales que en ella se habían refugiado con tiempo.
Acordóse Dios de Noé y, al fin, la lluvia cesó.
"¡Qué grande ha de ser la gravedad del pecado, puesto que mereció tal escarmiento!" (Maitines).
Pero todo eso era figura del futuro, recordándonos el misterio pascual. A esta agua de cólera habían de suceder las aguas de amor o sea la Sangre preciosa de Jesús, que había de lavar y regenerar a todos los pueblos.
En el arca de madera se salva el humano linaje, y con el madero de la Cruz lo restauró también Jesús. "¡Oh cruz!-dice la Iglesia-tú sola fuiste digna de ser para este náufrago mundo el arca que lleva al puerto." (Himno Pange Lingua).
La puerta abierta en un costado del arca, por donde entraron los que habían de salvarse del diluvio, figuraba la Iglesia y el misterio de la redención, pues también a Jesús le abrieron el costado, que es la puerta de salvación por donde manaron los Sacramentos, que dan la verdadera vida a las almas.
Pero tenemos en Noé sobre todo una figura de Cristo, pues Dios le nombró "padre de toda la posteridad". Y "el ramito de oliva figuraba ya por su frondosidad la dichosa fecundidad que Dios concediera a Noé al salir del Arca" (1Petr 1, 23).
Por eso San Ambrosio llama seminarium al arca, conteniéndose en ella la simiente de vida, que debía henchir el mundo entero.
Viene hoy en la liturgia el Evangelio del Sembrador. Precisamente, "la semilla es la palabra de Dios". "En tiempo de Noé perecieron los hombres, y fue por su incredulidad; mientras que Noé construyó su arca guiado por la fe, condenando así al mundo y haciéndose heredero de la justicia que proviene de la fe." "Y habrá-dice San Agustín-tres especies de cosechas, como hubo tres pisos en el arca."
San Pablo, en la Epístola, entabla, aunque forzado por la causa del Evangelio, una apología de sí mismo, ponderando cuanto ha trabajado por predicar la fe a los Gentiles. Él es, en efecto, el Predicador de la Verdad, "el ministro de Cristo", o sea el escogido por Dios para revelar a todos los pueblos la Buena Nueva del Verbo Encarnado. ¡Quien nos diera tener a este santo e incomparable apostol la cálida devoción que le tenía el gran Crisóstomo, el cual sólo ansiaba poder besar las cenizas de aquel que tan amante se mostró de Cristo crucificado!
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